GEORGE MILESON.

El regreso fue una versión de la amistad de sangre que tuve contigo desde el primer momento que cruce una frase contigo, tu vienes de los lejanas tierras del sueño conquistador… yo soy de una tierra verde donde las montañas sitian el esfuerzo por conseguir una amistad de sangre y hermandad para toda la vida.

Una llamada de teléfono es una lección nueva para mi, la noche se convierte en un fenomeno bohemio, pero tu arte y tu amistad me hace sentirme un hombre seguro de mismo, cuando te escucho siento la experiencia que un día posiblemente podamos llegar, tenemos los mismos sueños, queremos triunfar en caminos diferentes pero con el mismo objetivo de nuestras vidas.

Tengo una carrera por los caminos de la fe pendiente con el rubio del millón de dolares, su orden es una cuestión de hermanos para toda la vida, el rubio siente como suyo su propio camino, pero siente que necesita un valor seguro como la de una persona que vive entre montañas y pastos verdes, tengo la sensación que si no existiera su vida, seguramente la mía sería huerfana hasta el fin del amanecer.

El piano hace sonar la melodía dulce, simplemente cuando el rubio acaricia el piano oigo las campanas de mi vida envuelta para siempre en su propia amistad, su ROSALITA es un refugio para el, lo que no sabe es que mi refugio fue un día el conocer a ROSALITA, fue lo que siempre quise ser, y nunca pude ser…, hay un camino largo desde su casa hacia la mía, pero la distancia no es obstáculo siempre y cuando nuestras necesidades sientas realizadas cualquier sueño en conjunto.

No puedo sentir de otra manera mi vida, cuando oigo VOLVER A CASA es la leyenda de mi profeta vestido de moisés, el cabello rubio se riza entre el manto de MOISES y mi propio destino, siento que tenemos un proyecto y una sensibilidad de sangre para el resto de nuestra vida en común, por eso cuando miro y oigo un acorde del rubio de millon de dolares siento la necesidad de abrazar y respirar en libertad.

Mi tierra es verde, tu tierra es el paraíso en forma de una verdadera utopía vestida de azul bendito, como el manto que un día el poder no dio para poder enseñar que la vida es la mayor recompensa que uno pueda imaginar, eso transmite tu con tu verdad y sencillez, y eso me haces tu vivir a mi, siendo tu amigo de sangre y hermano real.

Hay un peaje de vuelta que pagar, hay un camino por recorrer, pero si está el RUBIO del millón de dolares seguro que no habrá sufrimiento ni remordimientos hacia la autopista del EXITO, porque estoy seguro que la vida está alcance de su propio pensamiento, por eso siento la verdadera conquista a su lado de poder gritar mi libertad y sobre todo gritar MI VIDA ES MIA HASTA EL FIN.

Deja un comentario